Comer en asturias

Platos típicos gallegos

La huerta, el bosque, el río, el mar, el acantilado, la ría, la calle, el pueblo, el viñedo o la almazara… Cientos de escenarios donde se crean sabores que pasarán a formar parte de su bagaje culinario y de viaje como auténticas joyas irrepetibles.

En una breve selección de los platos imperdibles de la cocina asturiana, no puede faltar la fabada y el pote en el apartado de sopas, la ternera asturiana como emblema de la mejor carne, las delicias del mar en forma de pescados y mariscos, y otros platos imperdibles como el cachopo, los míticos quesos artesanales “pitu de caleya”, el arroz con leche y, por supuesto, los elixires típicos asturianos, la sidra asturiana y el vino de Cangas.

¿Qué se come en Asturias?

Hay que probar: la fabada, las cebollas rellenas de atún, el arroz con leche, las casadiellas, el cachopo, la merluza o el pixín al ciderro, el pote asturiano, el riso con pitu caleya, la tenera o el cabritu…

¿Qué se come en Oviedo?

Entre los platos típicos está el principal, La Fabada. Es uno de los platos más populares de Asturias. Es un plato sencillo, elaborado con alubias, cerdo, morcilla y chorizo. Para acompañar estos platos, la bebida típica de la capital asturiana es la Sidra.

  Comer en muros

Comer en oviedo

Salimos de Oviedo para explorar pueblos medievales, naturaleza, lagos y montañas, siempre tomando la excelente cocina asturiana y la bebida que hasta los dioses beberían: la sidra.

Conduzca por la N-634 en dirección a Arriondas y luego hacia Cangas Onís para llegar al Lago de Covadonga: un espejo de agua transparente desde el que podrá admirar el amenazante borde de Los Picos de Europa.

Además de las grandes bahías, hay playas de todo tipo, pequeñas y grandes, rocosas y escondidas. La costa este con Villaviciosa y la playa de Rodile también es preciosa. También se puede llegar a la curiosa playa interior a 100 metros del mar, cerca de Llanes.

Asturias

Foto de Christian Michelides. Nosotros los conocemos como canederli, las albóndigas de sémola también populares en el Tirol del Sur, pero muy populares en Viena. Son los reyes indiscutibles de la grießnockerlsuppe, una sabrosa sopa a la que las albóndigas aportan carácter y textura.

Foto de Kobako. En Viena abundan los platos principales a base de carne. Cualquier corte de carne se sazona y se cocina con hierbas, especias, salsas, cualquier ingrediente que pueda dar al plato un sabor inusual y especial. El rostbraten, costilla de ternera asada enriquecida con cebolla, vino y crema agria, no es una excepción.

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Viena tiene una tradición culinaria con muchas influencias y se inspira en países vecinos como Alemania, la República Checa, Italia y Hungría para crear una mezcla perfecta de sabores y sorpresas para el paladar.

Fabada

Este es mi primer post sobre Vacaciones en Austria 2019. He decidido crear “píldoras” de cada ciudad visitada que sean interesantes y cortas, que puedan servir de mini guía para saber qué hacer, qué ver y con consejos sobre dónde alojarse, comer y comprar. ¡Graz es la primera ciudad que marco porque me encantó! Salimos de Viena y llegamos después de dos horas en coche a esta ciudad situada en las montañas con pocas expectativas… ¡Me fascinó esta ciudad que parece pequeña mientras es la segunda más poblada de la Austira! Apreciamos su arquitectura, los paisajes, la amabilidad de la gente, la excelente comida …

Graz es la capital de la región de Estiria y es muy conocida por sus 6 universidades, conocimos a muchos estudiantes por la ciudad, incluso italianos. Desde 1999 está inscrita en el Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO porque su centro urbano es uno de los mejor conservados de Europa. Está a sólo 2 horas en coche de Viena y a 2 horas en coche de Liubliana.

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Los mejores lugares para visitar la ciudad desde arriba son: el castillo de Graz (Grazer Schloßberg), que se alza en una colina justo en el centro de la ciudad, y la Torre del Reloj, uno de los símbolos de la ciudad, que forma parte del castillo e indica la hora desde 1712. Almorzamos en el bar de al lado, donde se puede disfrutar de una espléndida vista de toda la ciudad. Para llegar allí tomamos el ascensor construido en la montaña y bajamos con el funicular, el Schlossbergbahn.

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